jueves, 29 de septiembre de 2011

LA VIDA ES UN PLACER


TE AMO, LO SIENTO, PERDÓNAME, GRACIAS.
Me corteja la vida
Y me enamoran  los maravillosos momentos
que me regala en cada instante
y disfruto con su fluir constante
con todo lo que me cautiva
de todo lo que me hace estar seducida por ella.

La vida es un placer
Porque palpito con la música más bella
La magia de las notas envuelve mi existencia
Y se aúnan con mi esencia,
Proporcionando diferentes estampas a mi espíritu
Todas bellas y majestuosas
Trascendiendo  en una comunión maravillosa.

La vida es un placer
Cuando me sumerjo
En la lectura de un interesante libro
Capítulo por capítulo
Palabra por palabra,
que agrupadas me hacen pensar, me ayudan a crecer
Me regalan sabiduría.
Por eso abro mi consciencia para recibir el conocimiento
Que se encuentra pleno de la filosofía del autor
La cual me ayudará a engrandecer mi espíritu,
también a mis pensamientos,
aclarando mis dudas,
aligerando mis momentos.

La vida es un placer
Pues me permite Saborear  ese exquisito platillo
Y reconozco que ha sido elaborado
 con gran esmero
y aprecio en cada paladeada
el amor y la ternura
De la persona que lo ha manifestado.

La vida es un placer
Y realizo mis labores,
Algunas fastidiosas,  otras amenas
Pero todas ellas son tareas que forjan mi espíritu
El hábito diario que moldea mi carácter
Y me transforma lenta y seguramente
En la persona en que me convertiré.

La vida es un placer
Cuando realizo un paseo por la colonia
Tranquilizando a mis pasos
Admiro los árboles, las flores, las personas, los perros, los colores,
Recibo el perfume del  aroma que me regala el viento
Y observo la belleza de la madre naturaleza
Y doy las gracias porque sé que formo parte de ella
Pues hace ya un tiempo que comprendí
Que todos somos uno, que todos somos el universo.

La vida es un placer
Para despedir la  luz del día y acoger la noche
Cuya  oscuridad se desvanece
 A través de  esa luz artificial llena de magia y alegría
que desborda el espacio que me rodea
Me bebo esa taza de espumoso café
Con una bella compañía, el amigo, el camarada,
Y con la plática, las carcajadas, las anécdotas
que juntos nos contamos, participamos y
Creamos  ese ratito ameno,
sabemos en nuestro fuero interno
Que este momento  será memorable.

Y llega el feliz momento,
 la hora  del encuentro familiar
La hora de la narración de las anécdotas vividas
Las buenas, las amigables,
 Y en platicar los ratos de disgusto
Y envueltos en la tertulia se acrecienta el amor
Con sonrisas, con caricias,
 alentándonos a seguir en la existencia
Y se hace una comunión de energía
De saborear el  último alimento del día
y todo termina en una fiesta.

Y así transcurrió este día
En el cual realicé mi mejor esfuerzo
Para estar feliz, agradecida,  
                                         Para decirme cada día,                                            
Que la vida cuando aprendes a vivirla
¡Será siempre un placer!
Angie Anaya









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